Apoyo a la lección 32

 Lección 32: He inventado el mundo que veo.

"Hubo un tiempo en que no eras consciente de cuál era la causa de todo lo que el mundo parecía hacerte sin tú haberlo pedido o provocado. De lo único que estabas seguro era de que entre las numerosas causas que percibías como responsables de tu dolor y sufrimiento, tu culpabilidad no era una de ellas. Ni tampoco eran el dolor y el sufrimiento algo que tú mismo hubieses pedido en modo alguno. Así es como surgieron todas las ilusiones. El que las teje no se da cuenta de que es él mismo quien las urde ni cree que la realidad de éstas dependa de él. Cualquiera que sea su causa, es algo completamente ajeno a él y su mente no tiene nada que ver con lo que él percibe. No puede dudar de la realidad de sus sueños porque no se da cuenta del papel que él mismo desempeña en su fabricación y en hacer que parezcan reales. " UCDM

Te liberas de las ataduras de este mundo cuando aplicas la idea de hoy. Has inventado el mundo que ves, ¿no te gusta lo que ves? ¡Tú lo puedes cambiar! No se trata de cambiar la forma, el mundo externo, sino tu manera de pensar. Tú eres el soñador, tú eliges qué sueño experimentar.

Cuando duermes y sueñas, normalmente son sueños tan reales que no sabes que estás soñando. Son sueños que tienen un argumento que te parece muy válido pero cuando despiertas se difumina tan rápidamente que ya no encuentras en él nada que sea coherente. Hasta que lo olvidas. Pues bien, no existe un mundo interno y un mundo externo, ambos son lo mismo. El mundo que ves es tu sueño, el sueño del ego.

El sueño del ego habla de que te separaste del Amor, de Dios, que eres culpable y que el mundo que ves es lo que mereces, un mundo donde todo tiene un fin, donde existe el dolor y el sufrimiento, el conflicto y la enfermedad.

Mientras creas ser un ego, mientras no sepas que estás soñando,  seguirás dando valor al sueño del ego, que te recuerda (al llevarlo a tu presente) un sueño que ya pasó, culpándote de lo que sucede en el mundo y culpando a otros también, sufriendo, enfermando, muriendo y naciendo, una y otra vez, cada vez siendo un personaje distinto, pero olvidando siempre el anterior. 

Normalmente el soñador sigue soñando su sueño de dolor y muerte hasta que se cansa y piensa que tiene que haber algo mejor que no se ha permitido experimentar y, entonces, está dispuesto a escuchar al Amor. Todo aquel que está realizando este curso quiere algo mejor, por eso está aquí. Una llama de esperanza se ha encendido en tu corazón y sólo hay que hacerla crecer.  La lección de hoy puede avivar esa llama cada vez que lo necesites.

"Lo único que necesitas hacer es ver el problema tal como es y no de la manera en que lo has urdido". UCDM

No hay nada que te pueda dar más paz que recordar que has inventado toda situación que experimentas, que has inventado el mundo que ves, que eso no tiene por qué ser así. Puesto que has inventado esa situación ahora se la puedes dar a tu corazón, al Amor en ti, para que te muestre esa situación tal como la interpreta Él, para que la puedas ver con Sus ojos y no con los tuyos. Cuando lo haces, esa situación cambia, en vez de ver oscuridad ves Luz, ves el sueño feliz del Amor en vez de tu sueño. Y lo eliges a Él, te quedas con el sueño feliz y no das valor a tu sueño de maldad, dolor y sufrimiento porque no es real. Lo real es Amor y en eso confías.

Elegir escuchar únicamente al Espíritu Santo/Jesús, al Amor en tu interior, te va a ayudar a vivir en el mundo y a disfrutarlo plenamente, porque vas a soñarlo tal y como el Amor lo ve, en vez de dolor ves paz, en vez de tristeza ves alegría, en vez de enfermedad ves salud, etc., dejas de dar valor a lo que el ego quiere que veas porque sientes en tu interior que la Verdad es Amor y no miedo. Dejas de sentirte una víctima de las circunstancias para ser un obrador de milagros, aquel que elige interpretar lo que ve con el Amor.

Lo que para algunos son milagros, para ti son solo muestras de que has elegido la Verdad en vez de las ilusiones, has elegido perdonar lo que nunca fue. Ya no olvidarás que el mundo que ves surge de tu mente. Eres la causa y el efecto, el soñador y lo soñado. Eres mente, y tu mente ES Amor.

De esta manera te encaminas hacia tu despertar, vas a soltar todas tus creencias erradas, basadas en algo que no es real, y vas a creer en lo que realmente Eres. No vas a dejar de Ser, eso es imposible, solo vas a dejar de creer ser lo que no eres. Vas a confiar en el Espíritu Santo/Jesús, la Presencia del Amor en ti y el sueño del ego poco a poco, desaparecerá.

"Alégrate de que [la causa de tu sufrimiento esté en tu mente], pues de esta manera tú eres el único que puede determinar tu destino en el tiempo. Las únicas alternativas que tienes ante ti son o bien una muerte durmiente y sueños de maldad por una parte o bien un feliz despertar y la alegría de la vida por otra " UCDM

"Acepta el sueño que Él te dio en lugar del tuyo. No es difícil cambiar un sueño una vez que se ha identificado al soñador. Descansa en el Espíritu Santo y permite que Sus dulces sueños reemplacen a los que soñaste aterrorizado, temiéndole a la muerte. El Espíritu Santo te brinda sueños de perdón, en los que la elección no es entre quién es el asesino y quién la víctima. Los sueños que te ofrece no son de asesinatos ni de muerte. El sueño de culpabilidad está desapareciendo de tu vista, aunque tus ojos están cerrados. Una sonrisa ha venido a iluminar tu rostro durmiente. Duermes apaciblemente ahora, pues éstos son sueños felices." UCDM

"¿Qué otras alternativas tienes ante ti sino la vida o la muerte, despertar o dormir, la guerra o la paz, tus sueños o tu realidad? Existe el riesgo de pensar que la muerte te puede brindar paz porque el mundo equipara el cuerpo con el Ser que Dios creó. No obstante, una cosa jamás puede ser su propio opuesto. Y la muerte es lo opuesto a la paz porque es lo opuesto a la vida. Y la vida es paz. Despierta y olvida todos los pensamientos de muerte, y te darás cuenta de que ya gozas de la Paz de Dios. Sin embargo, si es cierto que realmente puedes elegir, tienes entonces que ver las causas de las cosas entre las que eliges exactamente como son y dónde se encuentran. " UCDM